Si en 2019 los científicos publicaron un artículo sobre cómo extraer el oxígeno de un simulador de polvo de luna (más conocido como regolito lunar); en este 2020, el primer prototipo extractor de oxígeno está listo para intentarlo a mayor escala en el Centro Europeo de Investigación y Tecnología Espacial en los Países Bajos.
El regolito lunar ha sido estudiado a conciencia desde que las misiones Apolo trajeron muestras. Más tarde, realizando ingeniería inversa en dicho material, los científicos imaginaron que se podrían construir bases con ladrillos horneados de regolito e incluso usándolos para almacenar calor durante las largas noches lunares. Dichas investigaciones revelaron que el oxígeno, afortunadamente, es el elemento más abundante en el regolito de la Luna: el 40-45% de su peso. El problema es que no está exactamente en forma transpirable, pues el oxígeno está encerrado dentro de minerales de óxido.
"Ser capaz de conseguir oxígeno de los recursos encontrados en la Luna sería de muchísima utilidad para los futuros colonos lunares, tanto para respirar como para la producción local de combustible para cohetes", aclaró Beth Lomax, de la Universidad de Glasgow, en un comunicado de la ESA.
Los intentos en el pasado de extraer el oxígeno del regolito lunar han dado malos resultados, siendo un proceso demasiado complejo y con poco rendimiento final. Sin embargo, el método actual utiliza una técnica llamada electrólisis de sales fundidas con el que se puede extraer hasta el 96% del oxígeno.
Fabricando aire
El proceso funciona de la siguiente forma: primero, se coloca el regolito en una canasta forrada de malla. Se agrega cloruro de calcio, el electrolito, y la mezcla se calienta a alrededor de 950 ºC, una temperatura que no funde el material. Tras esto, se aplica una corriente eléctrica que permite extraer el oxígeno y conducir la sal a un ánodo, donde puede eliminarse fácilmente. Y voilà: ya tenemos oxígeno respirable. Esta versión puede utilizarse como prueba de concepto y, con un mayor refinamiento, algún día se podría enviar un dispositivo similar a la luna para ayudar a mantener una colonia sostenible.
"Para respirar o para producir combustible para cohetes, obtener oxígeno de los recursos encontrados en la luna será de gran beneficio para los futuros colonos lunares", afirmó Lomax.
Por si esto fuera poco, el proceso de electrólisis tiene otro subproducto útil: aleaciones metálicas de las que también podrían hacer buen uso los astronautas.
El equipo está buscando diseñar una "planta piloto" que pudiera estar operativa en la Luna a mediados de la década de 2020 extrayendo regolito lunar real y no el simulado, que es con el que han estado trabajando y tiene la misma composición que el real pero no es tan valioso como este. Recordemos que, en cierto modo, el tiempo apremia, pues en 2024 el hombre volverá a pisar la superficie de la Luna y este acontecimiento será solo el principio de una nueva era espacial.
"La ESA y la NASA van a volver a la Luna con misiones tripuladas, con la intención de quedarse", expuso Tommaso Ghidini, Jefe de la División de Estructuras, Mecanismos y Materiales de la ESA. "Por ello, estamos cambiando nuestro enfoque de ingeniería hacia un uso sistemático de los recursos lunares in situ. Estamos trabajando para sostener presencia humana en la Luna y quizás algún día Marte".
Fuente: MuyInteresante